La educación inicial y la atención a la primera infancia son consideradas la base fundamental en el desarrollo del ser humano que permite, desde una edad muy temprana, reforzar la psicomotricidad y la socialización. Las iniciativas para asegurar la continuidad pedagógica se piensan desde este principio, y dos maestras lo demuestran con sus acciones. Sus trabajos han sido inscritos en el Registro de Iniciativas Pedagógicas del Fondo Nacional de Desarrollo de la Educación Peruana (FONDEP).
Fiorella Rivera Bravo es una de ellas. Es profesora de la I.E. 338 Manitos Creativas, del distrito de San Martín de Porres, y desde que inició la pandemia a causa de la COVID-19, impulsa la iniciativa “A movernos en familia con manitos creativas”, que se presenta como una estrategia de soporte emocional para las familias y una estrategia de enseñanza-aprendizaje para los pequeños, promoviendo la competencia del área de psicomotriz, que les permite desenvolverse de manera autónoma.
Para desarrollar la iniciativa, las docentes suben un video de la sesión al canal de YouTube de la institución, para que los estudiantes con apoyo de sus familias realicen las actividades psicomotrices propuestas en un espacio adecuado del hogar y utilizando materiales que estén a su alcance. Al término, envían sus evidencias a través de fotos, videos y respuestas a las preguntas de retroalimentación.
“El área de psicomotriz es quizá la más importante porque se trabajan las emociones, cómo comunicarse e interactuar con otros niños, además es una oportunidad para estimularlos y tratar las dificultades a tiempo. También se trata de una preparación previa a la escritura, la lectura y la escucha de instrucciones.”, manifiesta
Hasta la fecha ha logrado que el 80% de los estudiantes con sus familias pueda visualizar las actividades, pero todavía hay dificultad en el envío de las evidencias. Hay un 40% que tiene problemas de conectividad, a nivel económico, de salud y problemas familiares.
Por otro lado, está la maestra Rosa Sarayasi Yauri, quien viene trabajando la iniciativa “Retroalimentación cíclica en el nivel inicial” con los estudiantes de la I.E. 376 Virgen de Fátima, del distrito Pio Pata, en la provincia de Huancayo (Junín).
Esta iniciativa nace debido a que durante las primeras semanas de trabajo remoto las evidencias que enviaban los estudiantes se limitaban a repetir los susurros de los padres y madres para que respondan adecuadamente. Para evitar esta situación, ella decidió involucrarlos en el proceso de retroalimentación, a partir del análisis de la evidencia trabajada por sus hijos.
“Si bien es cierto los padres y madres no tienen formación pedagógica, las evidencias y los materiales compartidos con ellos facilita su rol de retroalimentadores y mediadores del aprendizaje de su hijo o hija en forma permanente, pues pueden recurrir a ellos cuando lo consideren necesario”, manifiesta.
Asegura que este trabajo en equipo fortalece el clima en el hogar y evidencia mejores desempeños de los estudiantes en el desarrollo de las actividades y en el logro de sus aprendizajes.
Accede a la ficha y video de la iniciativa de la maestra Fiorella Rivera, aquí. Y de la maestra Rosa Sarayasi, aquí.