El Instituto Peruano de Evaluación, Acreditación y Certificación de la Calidad de la Educación Básica (IPEBA), y la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI), presentaron el libro “Dos Décadas de Formación Profesional y Certificación de Competencias. Perú 1990-2010”; el cual reconstruye veinte años del desarrollo del conocimiento y la experiencia nacional e internacional en formación profesional y certificación de competencias.
Asimismo, presenta un balance del desarrollo alcanzado en este campo estratégico para el desarrollo humano sostenible del país, con el fin de aportar al debate y reflexión sobre alternativas para el diseño de un sistema nacional, que articule y oriente las distintas iniciativas desarrolladas.
El libro plantea “el establecimiento de un Sistema Nacional de Cualificaciones y Formación Profesional, de gestión participativa, multiactores, interinstitucional e intersectorial, en el que las entidades públicas de los niveles nacional, regional y local, los gremios empresariales y de productores, los colegios profesionales, las organizaciones sindicales, entidades formadoras, organizaciones de la sociedad civil y de la Cooperación Internacional, asuman distintos roles y responsabilidades”
Como un acierto del IPEBA calificaron el economista de la Universidad del Pacífico, Gustavo Yamada, y el vicepresidente de Tecsup, Juan Inchaústegui, comentaristas de la presentación realizada el jueves 23 de junio.
Gustavo Yamada señaló que el libro “da en el clavo” cuando plantea que se requiere tender puentes entre la formación profesional y la inserción laboral, así como entre la oferta educativa y la demanda de desarrollo humano sostenible. En ese sentido señaló que existen “divorcios y desencuentros” entre la demanda laboral y la oferta educativa, por lo que – indicó –las empresas tienen dificultades para encontrar el personal técnico adecuado.
Por su parte, Juan Inchaustegui, saludó la presentación del estudio al que calificó como un “hito”. Durante su exposición, además de referirse a la articulación entre la oferta de formación profesional y la demanda laboral, criticó que la educación técnica sea llamada “no universitaria” con un sentido “despectivo” y resaltó la necesidad de revalorarla.
Esta publicación ha sido posible gracias al apoyo de Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI) y su Instituto para el Desarrollo y la Innovación Educativa-IDIE Perú (NP IPEBA).